¿Qué es el «movimiento Slow» ?

Hoy más que nunca, el individuo moderno vive sumido en una particular carrera de obstáculos en la que controlar el cronómetro hasta la milésima determina nuestra existencia. La desconexión del medio natural y su tempo, ligado a las estaciones y demás factores que escapan a nuestro control, parece un espejismo en las sociedades occidentales de hoy en día. Las ciudades se vuelven anónimas y levitamos, sumidos en nuestro peculiar universo de intereses. La prisa es el motor de todas nuestras acciones y la cinética de grand prix envuelve nuestra vida acelerándola, economizando cada segundo, rindiendo culto a una velocidad que no nos hace ser mejores.

El movimiento Slow no pretende abatir los cimientos de lo construido hasta la fecha. Su intención es iluminar la posibilidad de llevar una vida más plena y desacelerada, haciendo que cada individuo pueda controlar y adueñarse de su propio periplo vital. La clave reside en un juicio acertado de la marcha adecuada para cada momento de la carrera diaria. Se debe poder correr cuando las circunstancias apremian y soportar el temido estrés que en demasiadas ocasiones nos embarga; pero a la vez saber detenerse y disfrutar de un presente prolongado que en demasiados casos queda sepultado por las obligaciones del futuro más inmediato.

Movimiento Slow

Es una corriente cultural que promueve calmar las actividades humanas, tomar el control del tiempo dando prioridad a las actividades que redundan en el desarrollo de las personas, encontrando un equilibrio entre la utilización de la tecnología orientada al ahorro del tiempo y tomándose el tiempo necesario para disfrutar de actividades como dar un paseo o compartir una comida con otras personas.

Desafía el culto a la velocidad y va en contra de la vieja frase “el tiempo es oro”. Invita a rendir culto a la tranquilidad, a huir del estrés, y a disfrutar de las cosas en mayor profundidad sin necesidad de ir contrareloj y conectar con el interior del ser humano. Se trata de desacelerar el proceso y disfrutar al máximo del momento.

 Filosofía Slow

 Defiende la calidad de vida en su sentido más amplio, y pone por delante las necesidades de los seres humanos a través de un desarrollo económico respetuoso con los ritmos del hombre y de la naturaleza. A la recuperación de variedades agrícolas y ganaderas, alimentos y formas de producción tradicionales, une la defensa de la biodiversidad, el trato justo para los productores, ganaderos, agricultores y artesanos como depositarios y garantes de ese patrimonio cultural colectivo, la educación en el gusto y los sabores, una vuelta a la vida y las relaciones slow entre los seres humanos características de las culturas mediterráneas, la defensa de las ciudades slow y también del turismo slow.

Slow life

Hoy más que nunca, el individuo moderno vive sumido en una particular carrera de obstáculos en la que controlar el cronómetro hasta la milésima determina nuestra existencia. La desconexión del medio natural y su tempo, ligado a las estaciones y demás factores que escapan a nuestro control, parece un espejismo en las sociedades occidentales de hoy en día. Las ciudades se vuelven anónimas y levitamos, sumidos en nuestro peculiar universo de intereses. La prisa es el motor de todas nuestras acciones y la cinética de grand prix envuelve nuestra vida acelerándola, economizando cada segundo, rindiendo culto a una velocidad que no nos hace ser mejores.

El movimiento Slow no pretende abatir los cimientos de lo construido hasta la fecha. Su intención es iluminar la posibilidad de llevar una vida más plena y desacelerada, haciendo que cada individuo pueda controlar y adueñarse de su propio periplo vital. La clave reside en un juicio acertado de la  marcha adecuada para cada momento de la carrera diaria. Se debe poder correr cuando las circunstancias apremian y soportar el temido estrés que en demasiadas ocasiones nos embarga; pero a la vez saber detenerse y disfrutar de un presente prolongado que en demasiados casos queda sepultado por las obligaciones del futuro más inmediato

Slow life no significa pasividad, sino una redistribución de nuestra energía vital hacia valores y actitudes fundamentales con el fin de alcanzar una mejor calidad de vida.

Slow Food

Nace con un objetivos claros: reencontrar el placer de la buena mesa, incentivar la buena gastronomía y el buen vino, y propiciar la educación de los sentidos para redescubrir la riqueza de los aromas y los sabores.

Slow Cities

 En ellas no hay lugar para la prisa y se trata de fomentar la creación de una conciencia más humana. Abundancia de zonas peatonales y zonas verdes, el cuidado de la gastronomía y la cultura autóctona, y el esfuerzo por mantener un ambiente tranquilo y cálido, lo más libre po sible de ruido y contaminación. El movimiento slow es una fórmula muy acertada para impulsar mejoras en los municipios en todos los ámbitos y mejorar la calidad de vida de sus habitantes.

 

 Slow Travel

Una máxima del “slow travel” es disfrutar tanto del viaje como del destino, es decir, elegir el tren para contemplar el paisaje, o la bicicleta para un contacto más directo con la ciudad. De ese modo, se evita el avión y la obsesión de hacer el máximo número de kilómetros en vehículo.

En la ciudad que se visite, el slow travel propone caminar e invitar al grupo a disfrutar de los detalles, que llevando un ritmo rápido se pasarían por alto, como una fachada bonita, una cafetería con encanto, un restaurante típico.

Una respuesta a “¿Qué es el «movimiento Slow» ?

  1. Hola, felicidades por la iniciativa. Somos una empresa nueva de turismo slow, http://www.divertimente.com, y nos gustaría participar en el festival y la comunidad, podéis mandarnos más información? Nuestro mail es divertimente@divertimente.com. Muchas gracias, nos sentimos menos solos!

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